Cómo hacer una E.I.A

En este post te contamos en forma resumida cómo hacer una E.I.A (Evaluación de Impacto Ambiental).

Cómo hacer una E.I.A

Una Evaluación de Impacto Ambiental, también conocida como EIA por sus siglas, refiere a un estudio o procedimiento que se realiza para diferentes proyectos con el objetivo de detectar los impactos ambientales más significativos. De ellos se intentará maximizar los impactos positivos y minimizar los negativos, buscando mejores alternativas y estrategias, estableciendo planes de manejo, contingencias y monitoreos sobre aquellos factores de riesgo detectados.

Siempre que nos referimos a una EIA, hablamos de proyectos, ya que la misma debe elaborarse con anterioridad a cualquier acción que implique cambios en los ecosistemas o el territorio, por lo que se trata de una herramienta predictiva y preventiva que nos permite evaluar y tomar las mejores decisiones para un mejor manejo ambiental de nuestro proyecto, y una mayor sustentabilidad del mismo.

¿Cuando se requieren estos estudios?

Se requieren para todos aquellos proyectos de obras civiles, proyectos de infraestructura y servicios, proyectos de mediana y grandes obras, proyectos de turismo, proyectos agropecuarios y proyectos industriales.

¿Cómo hacer una EIA? Principales componentes

Los principales componentes de una EIA son:

  • Estudio de línea de base: consiste en una descripción y análisis de los recursos ambientales del área de influencia del proyecto, lo que permitirá conocer la calidad ambiental. Debe involucrar datos acerca del medio ambiente físico, características climáticas, geología y geomorfología, recursos hídricos, datos atmosféricos, medio biológico (fauna y flora), características socioeconómicas y de infraestructura, densidad de población y usos del suelo.
  • Descripción del proyecto: consiste en un detalle del tipo de actividad que se realizará y todas las acciones involucradas en el proyecto, discriminadas en tres etapas operativas: construcción, funcionamiento y abandono.
  • Identificación y evaluación de los impactos ambientales: resultan del cruce entre las acciones a realizarse y los factores ambientales que serán afectados por las mismas, ya sea de manera positiva como negativa. Los factores ambientales generalmente más utilizados son: suelo, cursos y cuerpos de agua superficiales, calidad de vida (ruidos, paisaje), calidad del aire, situación socioeconómica (empleo, servicios, infraestructura) y agua subterránea.
  • Plan de contingencia y monitoreo: consiste en elaborar un plan de acción una vez identificados los puntos críticos del proyecto, para generar el menor impacto posible y, así mismo, controlar los riesgos asociados. Éstos suelen ser: residuos, riesgos de incendio, efluentes líquidos, ruidos, efluentes gaseosos y riesgos de explosión.

Si quieres conocer más acerca de las E.I.A puedes consultar AQUÍ.

Compartir en:

Añadir un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *